domingo, 18 de octubre de 2015

Sigue intentándolo, carajo

Bien, tu primer libro ha salido al mundo.

Y el mundo no lo ha notado.

Bueno, quizás lo noten con el tiempo. Después de todo, deben estar leyéndolo y no saben cómo reaccionar ante tal maravilla de la literatura.

Y pasan los días.

Y pasan las semanas.

Y pasan los meses.

Y te indignas porque el mundo no te ha coronado como la nueva gran revelación, clásico inmediato y autoridad absoluta en el mundo literario. Ningún gran estudio te ruega de rodillas el filmar tu obra a cambio de un contrato millonario. Tus millones de fans no saben lo genial que eres, ni tú ni tu obra, y no te lo hacen saber.

*********

De vuelta a la realidad, mi estimada persona escribiente, lo más probable es que tu primer intento te salga mal. No en algo, sino en muchas cosas. De algunas de ellas te darás cuenta apenas salga tu libro al mundo, de otras te darás cuenta con el correr del tiempo, viendo a otras personas buscando lo mismo que tú, y luego de los siguinetes intentos.

Porque por supuesto que no te quedarás con un solo intento. ¿Qué te crees, que eres la/el Elegida/o? ¿Que tienes suerte de heroina/héroe? ¿Que el mundo te debe algo? ¿Que si no te salió bien a la primera es que apestas y que jamás deberías tocar una nueva idea de libro ni con un palo?

E, incluso si tu primer libro apesta, ¿vas a dejarlo así nomás? Oh, sí, muy en el fondo esperabas sacarte la lotería, y eso no tiene nada de malo. Lo malo es creerte que el primer resultado es tu destino absoluto.

Ve a las biografías de las cinco personas que más admiras como escribientes, literatas, escritores. Fíjate cuánto tuvieorn que insistir para que les publicasen algo, y cuánto tuvieron que publicar hasta que salió ese título que te llevarías a tu lecho de muerte porque es así de bueno.

(Omite porquerías como Mierdúsculo y su fanfic porno, por amor a tu sanidad y coeficiente intelectual)

Que el mundo necesita que nuevos talentos vengan a demostrar que esta generación no es una porquería, que podemos hacer cosas, y que esas cosas tarde o temprano las leerá alguien y pasaremos a ser un pedacito de lo que es esa persona. Y sige jorobando y sigue publicando y sigue haciendo ruido y sigue diciendo y mostrando y escribiendo y yendo a eventos culturales y hablando con tus pares y sigue, mujer, hombre, persona, sigue intentándolo. Busca opciones, no te quedes con una sola realidad, hincha las petunias o las pelotas, sé audaz, vende tu obra como algo que la gente quisiera leer.

Así que a lamerse las heridas y a seguir intentándolo, carajo.

martes, 6 de octubre de 2015

Cómo dar a conocer tu libro, gratis (o recibiendo dinero a cambio)

Un libro publicado es genial, pero un libro que conoce o desea conocer mucha gente es mejor.

Se puede hacer una campaña publicitaria en sitios como Facebook, Tumblr, Twitter o con Google, por ejemplo, para lo cual necesitas dinero, y cuentas bancarias, tarjeta de crédito o similares. Si prefieres, por el motivo que sea, utilizar esos recursos en otros sitios, es entendible. Hay otras opciones, gratuitas y hasta puede que ganes algo de dinero, u otros beneficios.

Me remitiré a las opciones que encontré con un ebook, aunque muchas de las mencionadas valen para libros físicos o, incluso, no impresos.

  • Si tu libro está relacionado con alguna carrera académica, y estudias en la universidad que la dicta, puedes averiguar por proyectos de extensión. Dependiendo de la universidad a la que vayas, tendrá distintos requisitos y beneficios. Pueden que te publiquen, te promocionen, o te paguen pro ello, dependiendo de cada universidad y la carrera en sí.
  • Si es de un nicho poco explotado, o con alguna característica buscada (en tal o cual escenario, con protagonistas con este o aquél característica, etc.), puedes proponer a páginas u organizaciones relacionadas que pongan enlaces a tu libro, ya sea de descarga gratuita o paga. Lo peor que puede pasar es que no te respondan, o que te digan que no.
  • Aprovecha eventos culturales varios. Hay libros en los que me he interesado porque su autor fue a un Slam de Poesía Oral y leyó algunos de sus textos.
  • Llama a los medios de comunicación, en especial a los culturales, y mencionales algún aspecto interesante de tu novela. El mejor momento es cuando están cubriendo una noticia grande, o un suceso importante relacionado con la historia de tu libro.
  • Las bibliotecas públicas pueden darte acceso a un público lector activo. Pregunta si puedes colocar un cartes publicitario o similares, y aclárale si es un libro que puedes comprar o adquirir de forma gratuita. Lo peor que pueden decirte es que no.

Estos son solo algunos, por supuesto, y nadie dice que debas ir por solo uno. Aprovecha y empieza a preguntar, lo peor que te harán es decirte que no.

jueves, 1 de octubre de 2015

El escribir no te salva de ser persona humana

Por más que corras, no te salvas de ser humana.

En otras palabras, de cometer errores.

Una de mis colegas escritoras me señaló un error en la primer página de su libro. Me dijo que pensaba que lo había revisado bien, pero se le pasó por alto un detalle. Una señora se lo dijo, de modo bastante enfático, apenas posó sus ojos en el mencionado error.

Yo tuve la suerte de poder encontrar gente calificada para que sean mis lectores beta. Y luego cometí un error al publicarlo con X condición, siendo que la condición Y me hubiese acercado a mis metas. Caranchos. Dolió el darme cuenta que había cometido semejante error, más por vanidad que por otra cosa (en abos casos). Me hizo afinar la puntería, como también le sucedió a mi colega de arriba. Aprendimos de nuestras rodillas raspadas y seguimos pedaleando sin las rueditas.

He leído y oído a personas escribientes que muestran o mencionan alguna metedura de pata. Ya sea por la historia en sí (un fanfic escrito a los quince y revisado a los dieciocho, con todos los clichés y tópicos del género), la forma en que está contada o redactada ("abrí el libro y encontré tres errores sólo en la primera oración, así que lo dejé" me dijo una amiga sobre una saga de cierta fama nacional), o por cómo es publicada.

Cuando el orgullo te duela un poco menos, intenta no tropezar dos veces con la misma piedra. Siendo que eres de la especie humana, será difícil, pero inténtalo de todos modos. La recompensa será evolucionar, como un personaje dinámico, y adquirir puntos de experiencia. Vale la pena.