El largo camino de publicar una novela: Qué es y para qué sirve el ISBN

Si ya has registrado tus derechos de autor de tu obra, digamos X, y aún no la has publicado, entonces no tienes por qué preocuparte por el ISBN, o el Número Normalizado Internacional del Libro (International Standard Book Number, ISBN). Si, en cambio, quieres publicar X, puede que sea buena idea el ir a por un ISBN.

Este dígito, de trece cifras, ayuda a identificar un libro en específico, en una edición en específico. Esto quiere decir que si publicas X en edición de bolsillo, tendrás un ISBN, y si X es publicado en otro formato (de lujo, tapa blanda con solapa, digital, en otro idioma con el mismo formato -o uno distinto-, etc,) entonces recibirá otro ISBN. Ese mismo número es válido a nivel mundial.

El ISBN consta de cuatro partes: 

• Identificador del grupo o país, que sirve para identificar a un grupo nacional o geográfico de editores.
• Identificador del editor, que identifica aun editor particular entre otros editores.
• Identificación del título, que identifica un título en particular o la edición de un título.
• Cifra de control, la última, sirve para validar el ISBN.

El ISBN es asignado por agencias de grupos nacionales alrededor del mundo, coordinados por la agencia internacional ISBN en Berlín, Alemania. Cada país posee una agencia determinada, porlo que si vives en España puede que no recurras a la misma que si vives en Brasil, por ejemplo.

Algo muy importante que debes sabes es que el ISBN no protege tus derechos de autor. Es por eso que, si quieres publicar X (tu obra) debes asegurarte, primero, que la hayas terminado y que no la vas a modificar (si corriges no hay problema, pero si haces cambios importantes debes solicitar otro ISBN), y segundo, registrar tus derechos de autor de esa misma obra. Una vez tengas la confirmación de tus derechos de autor, sólo entonces solicita el ISBN.

De hecho, el ISBN no es obligatorio si publicas en formato digital. Y más aún si se trata de obras gratuitas, es decir, no comercializables. Cuando sólo había una forma de publicar libros, en papel, la historia era otra, pero hoy en día no te la piden de forma obligatoria en las plataformas de publicación digital. Smashwords te da uno que utiliza en su catálogo premium, pero no puedes usarlo fuera de esa plataforma, y Amazon te da un número con formato propio, por ejemplo.

El número de trece cifras en cuestión es el número de un catálogo, usado por el mundo comercial literario. No te dará más difusión por sí solo, te dará un número para identificar tu obra.